viernes, 11 de mayo de 2007

TLC y empleo

Es uno de los temas más sensibles, con el que más juegan los promotores del TLC con las necesidades de todos los ticos: el empleo. Y como docente, sobre todo del área técnica, sería irresponsable e inhumano no preocuparme por este tema.

TLC = Trabajo para los costarricenses... Qué lindo suena, pero ¿cuál será el precio de este trabajo? Esta vez me basé en el estudio hecho por Mauricio Castro asesor de la ANEP (valga mencionar que dicho estudio no pudo ser refutado por la Comisión de Asuntos Internacionales) y en 101 razones para oponerse al TLC, que será un clásico, de Henry Mora, Catedrático de economía de la UNA.

El presente documento tendrá tres partes:
I Empleos que se ganan
II empleos que se pierden
III Calidad del empleo




Como siempre, debo aclara varios puntos antes de explicar:

ICC, Iniciativa de la Cuenca del Caribe

CEPAL

PIB

Farm Bill

Derechos internacionalmente reconocidos por la OIT (Organización internacional de trabajo)

I EMPLEOS QUE SE GANAN

Muy contrario a lo que dice el gobierno, la ICC no se va a vencer pues como ya sabemos es una Ley que debe ser derrogada por el Congreso de Estados Unidos, quienes apenas si aprobaron el DR CAFTA por 2 votos y los productos que actualmente están siendo beneficiados por esta ley, entre otros son: piña, melón y banano, cuyos principales exportadores son empresas estadounidenses. Así que el Congreso de los Estados Unidos no la derrogará porque sí, sabiendo que perjudicaría a su gente. Primera mentira: vencimiento de la ICC

Nuestros grandes negociadores, aseguraron muy orgullosos que todas las condiciones habían quedado igual, ja! tremendo logro! De esta forma, solamente el atún, el azúcar y el etanol, lograron un mejor acceso al mercado estadounidense con el TLC. En este entendido, está claro que NO son miles los empleos que se generarán con estos tres productos, pues su industrialización se lleva a cabo por procesos muy tecnologicos. Segunda mentira: Tendremosmos mucho más acceso a un mercado tan grande.

Aún así con la eventual derrogatoria de la ICC solamente se perjudicarían un 11% de las exportaciones (excluyendo los textiles, que está claro que nunca vamos a competir contra 150 colones por hora que ganan los chinos), lo que conllevaría una pérdida de 65 mil empleos directamente relacionados con ella. Tercera mentira: perderemos 500 mil empleos si no se aprueba el TLC.

El peligro sí sería "darle la oportunidad al TLC" y después denunciarlo, si no nos sirve, pues ahí si se irían al traste tanto los accesos que nos da la ICC como los del TLC.

UN estudio reciente de la CEPAL demostró que es falsa la premisa de que un aumento en el PIB produce aumento en el empleo, tal como se demostró con la llegada de INTEL, cuando aumentaron ambos índices. El mismo estudio estimó que se crearán 150 mil empleos para toda la región en 6 años, de los cuales, para Costa Rica serán 18 mil, o sea, 3 mil por año. Las zonas francas, por ejemplo, produjeron en 16 años (84-00) 34 mil empleos, equivalentes al 2,5% de la población ocupada. Cuarta mentira: El aumento de exportaciones es sinónimo de más empleos.

¿Qué ganamos? (extracto de Costa Rica S.A.)


TLC: EMPLEOS QUE SE PIERDEN

MIles de productos inundarán el mercado costarrincese, representando competencia desleal a nuestros productores y a las PYMES que se dedican al mercado interno, las cuales representan un 81% del totalidad de las empresas del país. ¿Por qué competencia desleal? El proyecto Farm Bill de Estados Unidos, otorga a sus productores subsidios millonarios, a veces hasta de un 45% de su producción, por ejemplo en el 2002 hubo subsidios por más de $9 728 millones.

Es evidente que en un principio todos estos productos beneficiarán a los consumidores, por venir más baratos (aunque en este momento los dominicanos NO están disfrutando de estos ahorros en los impuestos), sin embargo al quebrar a los locales, ya no tendrán competencia y podrán establecer los precios a su antojo, por la simple ley de la oferta y la demanda. Como ha sucedido en telecomunicaciones, por ejemplo, en otros países cuyas tarifas son increiblemente superiores a las nuestras.

En este juego se verán afectados cerca de 130 mil empleos directos en áreas sectores como carne bovina, lechero, cerdo, pollo, granos básicos, industrias de genéricos, agroquímicos, entre otros.

De esta manera el costo de oportunidad de aprobar el TLC será de 35 mil empleos, cuando se derrogue la ICC y de 130 mil, cuando no.

Experiencia en México y Canadá (NAFTA)


TLC Y CALIDAD DE EMPLEO

Retomando el asunto de la competencia desleal, vemos cómo muchas empresas se verán en la necesidad de bajar costos, siendo uno de los más fuertes el recurso humano, con las leyes que le protegen: Código de Trabajo, Ley de protección al trabajador, entre otras. Para lograr dicho objetivo se tendrán muchos más empleados sin seguro, con jornadas inhumanas, sin vacaciones u otros derechos.

Ahora, no solo veremos estos derechos por el suelo a causa de las bajas en los costos de producción del mercado nacional, si no también en el TLC está muy claramente estipulado en el artículo 16.1 la definición de legislación laboral:

Artículo 16.1: Declaración de Compromisos Compartidos
1. Las Partes reafirman sus obligaciones como miembros de la OIT y sus compromisos asumidos en la Declaración de la OIT relativa a los Principios y Derechos Fundamentales en el Trabajo y su Seguimiento (1998)...
2. Las Partes afirman pleno respeto por sus Constituciones. Reconociendo el derecho de cada Parte a establecer sus propias normas laborales ...”.

Lamentablemente, este artículo establece disposiciones ambiguas y no contundentes en
materia de derechos laborales. Veamos por qué:

“Cada Parte procurará asegurar que tales principios laborales (OIT) y los derechos laborales internacionalmente reconocidos en el Artículo 16.8 sean reconocidos y protegidos por su legislación”.
“... cada Parte procurará garantizar que sus leyes establezcan normas laborales consistentes con los derechos laborales internacionalmente reconocidos, establecidos en el Artículo 16.8 y procurará mejorar dichas normas en tal sentido.”

De todo esto podemos deducir que los derechos que hemos adquirido a través de años de lucha y solidaridad, tales como: seguridad social, contrato de trabajo, aguinaldo, vacaciones y cesantía; se irán al cajón del olvido.

¿Qué clase de empleo es el que nos proponen?

Entendidas ya varias de las muchas mentiras que nos han querido hacer creer por medio de todo un despliegue publicitario, vemos que no hay tal de TLC = Trabajo para Los Costarrincenses, si no, los mismos de siempre.

El siguiente es un extracto del documental Costa Rica S.A. que explica también el impacto del TLC en el empleo





TLC = Todavía Les Cree?